No utilizamos hormonas en nuestra carne. En Chile, aunque el uso de hormonas en la producción de carne está permitido bajo estrictas regulaciones, es importante aclarar que no todas las carnes disponibles en el mercado son tratadas con estas sustancias. Las hormonas, como los anabólicos, se usan principalmente para acelerar el crecimiento del ganado y mejorar la conversión alimenticia. Estas se administran mediante implantes subcutáneos, y su uso está sujeto a períodos de retiro antes del sacrificio para asegurar la seguridad del consumidor.
A pesar de que es una práctica aprobada y regulada por las autoridades chilenas, algunos productores, como nosotros, preferimos no utilizarlas en absoluto. Estamos comprometidos con ofrecer carne libre de hormonas, garantizando un producto más natural y saludable. Si bien existen presiones para aumentar la producción de carne de manera más intensiva, creemos que la calidad y el bienestar animal son prioritarios. Por eso, nuestra carne proviene de ganado criado de manera natural, sin hormonas ni aditivos, ofreciendo una opción más saludable y responsable para nuestros clientes.